No aceptaré sino a la vida

Sí, loca, absolutamente loca.

Pero no angustiada

Pero no presa de redes ajenas

Pero no aislada del corazón de la tierra.

La belleza de mis manos

De mi mirada

Basta y es suficiente

Para merecer

Lo que merecen las plantas los cisnes

Las flores exóticas del amazonas

Libre del pasado inconcluso

Libre de las definiciones y los formularios

Libre de los tics cansadores

De la incomprensión de los ajenos

Nadar en un mar limpio y lleno de islas

Con cocos y peces sabrosos

Que sepamos amar hasta después de su muerte

Al fondo del mar hay seres que nadie ha visto

En las estrellas también

En las noches si se sueña

En las gotas de agua

En las de sangre

Y debajo de la tierra

En el pasado hay seres que nadie ha visto

Y en el futuro

Y en los lugares escondidos en el último rincón de la tierra

En los libros hay seres que nadie ha visto

Y en el cine

Y en el imaginario infinito de todos los artistas

Y de cada uno

Monstruos sirenas caciques solitarios

Algas, hadas, espectros, reyes

Mujeres bellísimas, hombres gigantes

Y también

Los que esperan ser traídos a la existencia

Los mestizos de todas las eras

Los pokegriegos

Los aseadores del alma

Los mercenarios del rock

Las lavanderas de lo radioactivo

Los coros sinfonicos de saturno

Y así.

No aceptaré argumentos de ningún tipo

Sólo evidencias sólidas

Como una baguette con queso

O un litro de agua mineral.

No aceptaré amenazas de ningún tipo

Como la cárcel, el manicomio o la televisión.

No aceptaré visitas dudosas

Ni malas intenciones.

Sólo aceptaré a la vida, que juega conmigo

Y me hace sufrir

Mientras espero

La venida de mi pegaso amante.